Efectos de la «en-quimicación»
Cuando uno se «en-quimia» sufre un extraño proceso de desvinculación con la realidad (en-quimicación = encoñamiento)
El día a día se traduce en un mirar constante al móvil, a darle al botoncito de enviar y recibir del e-mail y a una mini-crisis de ansiedad cuando lees: ningún mensaje nuevo.
Tus neuronas empiezan a funcionan a ritmos diferentes entre ellas y todo parece hacer referencia al objeto del «encoñamiento», notas un cosquilleo permanente en el cuerpo y se despiertan sentidos dormidos.
Como coindidas con el «sujeto de en-quimicación» los ojos se te van y se convierten en unos traidores que te delatan a la mínima. En ese momento un tímido baja la mirada, la cabeza, intenta hacerte invisible y/o mantener una conversación con otra persona. Un extrovertido quizás sonria o miré directamente a los ojos.
Pero hay algo que no falla. Si miras a sus labios y el sujeto también lo hace, no hay duda posible. La química es mútua 🙂
…y cuando NO hay química ya puede el cerebro o, incluso, el corazón razonar y alegar lo que quiera… 🙁
[…] Atusarse el pelo en presencia del sujeto de en-quimicación. Esto no pertenece sólo al ámbito femenino pese a que es más evidente. Las mujeres parece que se […]